El volumen de compras que realizamos por Internet crece constantemente. No es extraño que aparezcan problemas entre consumidores y vendedores con la cantidad de operaciones que se realizan continuamente.
Estas desavenencias también ocurren en el comercio tradicional, pero cuando la operación la realizamos online, los consumidores nos sentimos más desamparados y con falta de recursos en el caso de que algo salga mal.
El Observatorio de Internet surge como una iniciativa de la Agencia Española de Consumo, Seguridad Alimentaria y Nutrición, para proteger al consumidor en Internet, ante la necesidad de combatir los fraudes electrónicos y fomentar el consumo responsable.
Este es el propio objetivo que ellos mismos se proponen y que declaran en la presentación de su Web. Dicho así quizá pueda parecer sencillo, pero a nadie se nos escapa que no es tarea nada sencilla proteger al consumidor en Internet.
El observatorio de Internet cuenta con la colaboración de entidades públicas y otras organizaciones con las que llevar a cabo sus funciones para procurar el buen funcionamiento del mercado online y para proteger al consumidor.
Formulario de consulta para conflictos en la Red
Algo que puede tener verdadero interés para los usuarios que compramos online desde España a cualquier lugar del mundo es el formulario que el Observatorio de Internet pone a nuestra disposición para consultar los problemas relacionados con estas compras.
Podemos hacer uso de este servicio de consulta si respondemos sí a cualquiera de estas preguntas :
“¿Es usted un consumidor y ha tenido un problema con una empresa de comercio electrónico?
¿Tiene una consulta relacionada con sus derechos como consumidor?
¿Tiene alguna duda acerca de a quien tiene que dirigirse para resolver un conflicto en la Red?”
En realidad, aunque anuncian un formulario, lo que ponen a disposición del público es un correo electrónico al que escribir contando nuestro problema:
e-observatorio@msssi.es
Nos dejan claro que antes de buscar su consejo ante una reclamación debemos haber agotado todas las vías de diálogo directo y por escrito con el vendedor. Si transcurridos 30 días desde nuestra última reclamación no obtenemos respuesta, es cuando podemos pedir que estudien nuestro caso.
No obstante, también podemos escribirles para que nos respondan ante dudas o preguntas que puedan surgirnos relacionadas con las compras en Internet.
Ante un conflicto, nos solicitarán toda la información que pueda ser relevante para el estudio del caso (un teléfono de contacto, nombre de la empresa, etc…) así como las conversaciones de email o los archivos relevantes.
Esperamos que resulte útil este servicio, o mejor, que nunca lo tengan que utilizar.
Esto funciona solo para España?
Efectivamente es solo para España.