Las consolas de videojuegos actuales funcionan conectadas a Internet y por lo tanto son vulnerables a cibertataques dirigidos desde el exterior. Es fundamental hacer un uso seguro también de estos dispositivos para preservar nuestra privacidad y la seguridad de nuestros datos personales.
Se pueden convertir en una vía de entrada a ciberatacantes que podrían tener acceso a nuestros datos personales, incluso a las tarjetas de crédito preconfiguradas para el pago, así como realizar incursiones en la privacidad de las personas a través de, por ejemplo, una webcam.
El 57% de los usuarios desconocen que las videoconsolas pueden ser hackeadas
El mayor problema reside en que la mayoría de usuarios de estos equipos desconocen que son vulnerables a ciberataques. Este desconocimiento hace que los usuarios no tomen medidas para protegerse.
A través de la encuesta realizada desde este mismo blog con una serie de preguntas sobre hábitos y conocimiento de las videoconsolas, encontramos como resultado preocupante que el 57,8% de las personas desconocen que estos dispositivos pueden ser hackeados del mismo modo que un ordenador.
De la encuesta también se extrae que el 85,3% de los usuarios de videoconsolas desconocen que es posible mejorar la seguridad que viene por defecto preconfigurada en estos dispositivos y sólo el 14,7 % aseguran haber implementado algún mecanismo para mejorarla.
Asimismo, encontramos que el 73,1% de los encuestados reconoce no saber que la configuración de su videoconsola debe ser actualizada y el 14,4% que actualiza sólo el software, mientras que sólo el 12,6%, tanto el software como el firmware. Además, el 25,5% utiliza las mismas contraseñas para los juegos online que para otros servicios.
Uso del control parental
Otro dato relevante que se extrae de la encuesta es que el 42,7% de los padres reconocen no realizar ningún control del uso que realizan sus hijos de la videoconsola. Y entre los que sí lo hacen, el 38,5% su modo es limitando su tiempo de juego mientras que el 34,6% aseguran incorporar otras medidas como evitar que puedan realizar compras online.
Junto a esto, por lo que se refiere al control de la ciberseguridad de los dispositivos, el 66% de los padres aseguran ser ellos los que toman la responsabilidad de cambiar con frecuencia las contraseñas y gestionar personalmente la configuración, mientras que el 34% afirman relegar esta tarea en sus hijos.
Decálogo de seguridad en videojuegos
- Tener un ordenador protegido no garantiza que los datos del jugador estén seguros, no hay que caer en un exceso de confianza.
- No reutilizar contraseñas utilizadas en juegos online, si la contraseña se ve comprometida, tendrán acceso a otros servicios.
- Desactivar las restricciones impuestas por el fabricante de un videojuego, consola u otro dispositivo, elimina sus medidas de protección.
- Es necesario proteger cada dispositivo desde el que se tiene acceso a juegos on-line.
- Hay que desconfiar de todas las notificaciones recibidas donde se nos inste a introducir nuestro usuario y contraseña.
- Los juegos descargados de sitios no oficiales son un peligro para la seguridad del jugador, es mejor descargarlos de fuentes oficiales.
- Para garantizar la transparencia y la seguridad del jugador, solo se recomienda realizar apuestas en los operadores con el sello “juego seguro”
- Es muy recomendable tener instalado, tanto en los ordenadores como en los dispositivos móviles un buen antivirus.
- Es recomendable no introducir el nº de tarjeta de crédito si no es estrictamente necesario.
- La concienciación en materia de seguridad es muy importante, todos los usuarios son posibles víctimas de ataques.