Utilizar aparatos con pantallas intensamente iluminadas y hacerlo antes de dormir puede alterar nuestro ritmo biológico diario (ritmo circadiano) y provocarnos insomnio.
Nuestro reloj biológico nos regula con un ciclo diario que dura aproximadamente 24 h. No es completamente igual para todas las personas y puede sufrir pequeñas diferencias. Está relacionado con la concentración de una hormona conocida como “melatonina”, encargada principalmente de inducirnos al sueño. Se sabe que la iluminación afecta a la actividad que esta hormona tiene sobre nuestro organismo.
Un informe realizado por la Fundación Nacional del Sueño (National Sleep Fountation) de Estados Unidos, sobre los efectos de la luz intensa antes de dormir, nos indica que la exposición a luz artificial antes de irnos a la cama incrementa el estado de alerta y suprime la actividad de la melatonina.
Este estudio revela que las pantallas de emisión de luz se utilizan de forma intensa en una hora crucial antes de dormir. Ello podría explicar los datos extraídos de la encuesta que realizaron, que indica que dos de cada tres jóvenes manifiestan estar somnolientos durante el día y aseguran que no duermen lo suficiente. Esta exposición a luz intensa puede retrasar nuestro sueño hasta una hora diaria.
El informe también explica la diferencia entre la exposición pasiva a pantallas iluminadas, como el televisor, y las que requieren actividad e interacción, como videojuegos o utilización de ordenadores, tablets, smartphones, etc. Estos últimos nos exigen un mayor nivel de atención y/o ansiedad, provocando una clara perturbación en nuestro proceso de conciliar el sueño.
En el informe tambien podemos leer que “el gran uso de estas tecnologías que distorsionan las horas del sueño entre las generaciones más jóvenes puede tener consecuencias graves para la salud física, el desarrollo cognitivo y otros factores de bienestar”.
Todos estos aparatos que nos hacen la vida más fácil, agradable y divertida, si les damos un mal uso, puedan convertirse en un problema importante. Pueden ser los causantes de un déficit en nuestras horas de sueño y por tanto de un descenso en nuestro rendimiento y estado de salud en nuestra vida diaria.
Yo, particularmente estoy de acuerdo, al menos mi experiencia así me lo indica. Suelo llegar más relajado y somnoliento a dormir si previamente he estado leyendo o viendo la televisión. En cambio, si mi última actividad ha sido estar en el ordenador, aunque sólo sea leyendo, consultando, enviando emails, etc. llego con una menor predisposición al sueño.
Como conclusión, si seguimos los consejos de este estudio, evitemos el uso de cualquier pantalla iluminada e interactiva antes de dormir. Limitemos el uso de videojuegos, tablets y smartphones, cada vez más numerosos, entre nuestros jóvenes justo antes de dormir.
¿Será una tarea fácil? ¿O quizá no estáis de acuerdo con este estudio?
venga ya!!!!
yo uso el portatil hasta en la cama y duermo muy bien….. esos estudios los hacen los que buscan excusas para no dejarnos con el ordenador
Supongo que a los jóvenes les afectará menos que a los no tan jóvenes. A mi desde luego me pasa, si del ordenador me voy a la cama me cuesta más dormirme que si por ejemplo, acabo de usar el libro electrónico. No sabía que se debía a la melatonina….