A juzgar por las cifras de venta uno de los regalos estrella estas navidades, como casi todas, han sido y van a ser los videojuegos. España es el cuarto país de Europa donde más videojuegos se venden y es que en nuestro país este tipo de entretenimiento mueve anualmente más de mil millones de euros.
Es muy probable que nuestros hijos reciban este año un videojuego como regalo de reyes y, tanto si somos nosotros mismos los que escribimos la carta, como si el regalo llega por cuenta de un familiar, no conviene olvidar que en Europa disponemos de un sistema de identificación que nos permite entender de un vistazo el contenido del juego.
El Pan European Game Information, o Código PEGI, es un sistema europeo creado para clasificar el contenido de los videojuegos y otro tipo de software de entretenimiento. Fue desarrollado por la ISFE y empezó a utilizarse el año 2003. Este sistema se aplica actualmente en 25 países.
El código PEGI consta de dos señales identificativas. La primera hace referencia a la edad mínima para la que recomienda el videojuego no sólo por el tipo de contenido que incluye sino también por la jugabilidad con la que se ha diseñado. Y este es un elemento importante a tener en cuenta porque, por muy bueno que sea un juego, si un niño es demasiado pequeño para entender su complejidad o para manejarlo para él no tendrá ningún interés.
El segundo identificador es un icono que describe los elementos que incluye el juego. Se trata de ocho iconos (puede aparecer más de uno en la caja del juego) que nos ayudan a identificar específicamente con qué tipo de contenido van a encontrarse nuestros hijos.
Violencia:
Puede contener escenas de personas que sufran lesiones o que mueran, a menudo mediante el uso de armas. También pueden contener derramamiento o gotas de sangre.
Lenguaje soez:
Puede contener groserías, tacos, insinuaciones sexuales, amenazas, y toda clase de insultos.
Miedo:
Puede contener escenas que se consideran demasiado perturbadoras o aterradoras para los más jóvenes o los jugadores emocionalmente vulnerables.
Sexo:
Puede contener referencias a atracciones sexuales o relaciones sexuales. También puede contener desnudos y personajes femeninos vestidos con ropa sugestiva.
Drogas:
Puede contener referencias a las drogas ilegales o de una sustancia ficticia que tiene consecuencias paralelos a las drogas ilegales en la vida real (en uso, posesión o venta).
Discriminación:
Puede contener escenas de violencia o de acoso por motivos de raza, etnia, género o preferencias sexuales.
Apuestas:
El título puede contener escenas de apuestas (con dinero real o ficticio) y de juegos de azar.
Online:
Contiene un modo de juego online.
