Tuenti es, para muchos jóvenes y niños, su primera red social. Quizá puedan haber tenido experiencias previas con alguna otra red infantil, con contenidos apropiados y restricciones indicadas para niños, pero a partir de cierta edad, la mayoría de los padres se enfrentarán a una importante decisión, permitir o no a su hijo crearse una cuenta en Tuenti.
En realidad, el consentimiento de los padres, llegado el momento, será lo de menos. La cuenta se puede crear desde cualquier ordenador, sin el permiso de los padres y a la edad que ellos quieran, pues solo tendrán que mentir en su fecha de nacimiento. Después la utilizarán desde el móvil, tablet, ordenadores de casa y de amigos, colegio, etc. Debemos ser conscientes de que la cuenta en Tuenti se la van a crear queramos o no.
Por tanto, será mejor asumirlo y empezar a inculcar buenas costumbres y establecer algunas reglas que NUNCA deben saltarse y que, en conjunto, serán de aplicación después en otras redes sociales.
Los diez mandamientos de Tuenti
- No compartir la contraseña con nadie, es una clave secreta y debe permanecer segura en un lugar conocido de casa. Solo los padres pueden conocerla como medida añadida de seguridad.
- No aceptar la amistad de desconocidos, establecer relación en la red solo con aquellas personas que conocemos y que sabemos con seguridad que son quienes dicen ser. Si esto se cumpliera, no sería necesario insistir en el siguiente…
- No quedar jamás en persona con alguien que se haya conocido en la red social, detrás de un perfil de Tuenti podría esconderse cualquier tipo de persona.
- No compartir con nadie en la red información privada como fechas de vacaciones, direcciones, números de teléfono, etc. Nunca podemos estar seguros de quién puede llegar a verlo si los amigos no actúan con la suficiente privacidad.
- No compartir NUNCA imágenes eróticas o sexuales con NADIE, este tipo de imágenes y vídeos son el origen de los casos de acoso más dramáticos conocidos por todos tras hacerse públicas las imágenes y ser compartidas en todo Internet.
- No insultar ni responder a los insultos, recordar que todo aquello que ocurre en la red queda escrito y es muy fácil demostrar quién acosó o insultó, aunque aparentemente se tratara de una broma. Asimismo hay que saber que el ciberbullying o ciberacoso está muy perseguido y los responsables legales de los menores acosadores pueden enfrentarse a problemas muy serios.
- No compartir fotos con información privada propias, de la familia o amigos. Hay que respetar la intimidad y privacidad de todas las personas, especialmente la de los menores. Aprender a distinguir las fotos y vídeos con información personal de aquellas que no aportan información sensible.
- No convertir Tuenti en una obsesión, limitar el tiempo que se le dedica a diario, no publicar fotos ni estados continuamente y utilizar el chat moderadamente.
- No dejar abierta la sesión tras acceder a la propia cuenta en un ordenador ajeno, podrían hacerse pasar por nosotros e incluso robarnos la cuenta.
- No esconder los problemas en la red de ningún tipo. Los padres y tutores deben advertir del fenómeno del ciberacoso y otras situaciones de riesgo para que los menores aprendan a distinguirlas desde sus inicios. Pedir ayuda a padres u otros adultos de confianza desde el primer momento puede evitar que el daño se haga irreparable.
La mayoría de los consejos se resumen en uno solo – utilizar el sentido común – que como ya sabemos, es el menos común de los sentidos.