Hoy respondemos a una consulta realizada por uno de los jóvenes asistentes a nuestros cursos de seguridad para menores. Recordamos que contestamos a cualquier consulta recibida a través de nuestro formulario ‘Pregunta lo que quieras’.
“Algunos juegos te piden que ejecutes antes de jugar y creo que el ordenador me va un poco más lento que antes a pesar de que lo haya cancelado (la instalación del juego) ¿Cómo puede ser eso? ¿Pueden haberme puesto un virus y que yo no me haya dado cuenta?”
La instalación de juegos originales y procedentes de compañías de prestigio no suelen incluir programas o complementos que reduzcan la capacidad del ordenador y menos aún virus o cualquier otro tipo de malware.
Es más fácil instalar algún tipo de virus y programas “basura”, que solo hacen que consumir su capacidad, cuando instalamos juegos y aplicaciones descargadas de Internet procedentes de fuentes de dudosa reputación.
Que un ordenador funcione excesivamente lento puede deberse a muchas razones. Si la causa es que se ha quedado antiguo, difícilmente podremos llegar a regenerarlo, pues simplemente no será capaz de ejecutar el sistema operativo con la suficiente fluidez. Pero a veces, el funcionamiento anormal sí puede deberse a que alguna aplicación inútil está consumiendo recursos innecesariamente y si actuamos sobre ella y quizá sobre algún otro punto más, podamos recuperar su velocidad normal.
Pasos que podemos seguir para eliminar instalaciones indeseadas que nos ralentizan el ordenador:
- Buscar virus. Debemos actualizar nuestro antivirus y luego pedirle que realice un examen completo. Es aconsejable realizar también una inspección con alguna otra herramienta para mayor seguridad, como la que ya recomendamos en nuestra entrada sobre Microsoft Safety Scanner.
- Desinstalar programas. En Windows tenemos una sección donde revisar todos aquellos programas que hemos instalado y que quizá ni recordamos. Hay que dirigirse a ‘Panel de control’ y utilizar una herramienta llamada ‘Programas y características’ o ‘Desinstalar programas’. Nos aparecerá una lista de aplicaciones donde podremos elegir cuál queremos desinstalar.
Cuidado con lo que desinstalamos, ante la duda, es mejor no eliminar algo desconocido y buscar información en Internet o consultar a algún experto. - Software para optimizar Windows. Hay multitud de aplicaciones que podemos instalar y que nos ayudarán a optimizar el funcionamiento de Windows, aunque se trate de una versión antigua. Podemos destacar:
- CCleaner. Herramienta muy aconsejable que además se puede utilizar de forma gratuita.
- TuneUp. Posiblemente la más desarrollada del mercado y con muy buena reputación. Es de pago, pero tiene la ventaja de poderse probar 14 días sin compromiso.
- Glary Utilities. Muy interesante también, con un uso muy sencillo, dispone de muchas herramientas, incluso anti-malware y aunque tiene una versión de pago que añade alguna función, resulta más que suficiente con la gratuita.
Cualquiera de estas herramientas mencionadas arriba debe utilizarse con cierta precaución. Normalmente, las opciones de optimización que traen por defecto no modificarán nada esencial y el funcionamiento del ordenador simplemente mejorará.
No obstante, podemos modificar muchas de las opciones para que la “limpieza” sea aún mayor, podemos cambiar mucho la configuración de arranque, eliminar cachés, limpieza de papelera, etc. lo que puede llegar a perjudicar algún proceso si no sabemos bien lo que hacemos.
Resumiendo, hay que ser cuidadosos con lo que instalamos, no debemos confiar en todo aquello que descargamos de Internet. Pero, en cualquier caso, es recomendable realizar estas tareas de mantenimiento de vez en cuando para mantener nuestros ordenadores en un buen estado de salud.
[…] […]