Decía Shakespeare que el aprendizaje es un simple apéndice de nosotros mismos; dondequiera que estemos, está también nuestro aprendizaje.
Las tecnologías de la información ofrecen un mundo de posibilidades para aprender, investigar y disfrutar, e ir ensanchando ese apéndice con algo útil, aplicable y transformador.
LEER MÁS