Cuando nos conectamos a una red wifi mediante un dispositivo móvil, la configuración queda memorizada para facilitarnos las futuras conexiones.
Esta función que tienen todos los teléfonos, tablets y portátiles es muy cómoda para el usuario, todos lo comprobamos cuando nos conectamos a la red wifi de casa automáticamente sin necesidad de realizar ninguna gestión ni introducir de nuevo la contraseña.
Pero del mismo modo que quedan guardadas las configuraciones de las wifis protegidas con contraseña, también lo hacen las conexiones que hacemos con las no protegidas o “abiertas”.