Los programas o aplicaciones conocidos como ‘keylogger’ tienen como finalidad espiar todo lo que sucede en el dispositivo donde se han instalado, algo que normalmente se realiza de forma secreta. Permite la supervisión de todo lo que se hace en él y se puede revisar desde el propio dispositivo o desde otro de forma remota.
Inicialmente se crearon con el único objetivo de registrar las pulsaciones de las teclas (key = tecla; logger = registrador), pero las versiones actuales permiten muchas más opciones. Son programas espía que ofrecen todo tipo de información de la actividad realizada además de las teclas pulsadas, como capturas de pantalla que se toman periódicamente o una relación de los programas que han sido ejecutados. Guardan toda esa información en diferentes archivos en una carpeta oculta y es facilitada de forma silenciosa a quién lo instaló.