Twitter es una red social que está alcanzando una repercusión nunca vista. Se cuentan a cientos de millones los usuarios que diariamente escriben y leen pequeños mensajes a todas horas del día y en todos los rincones del Mundo.
El crecimiento de la red es imparable, se ha extendido a muchos jóvenes y niños que, tentados por su popularidad la utilizan ahora incluso como medio de comunicación habitual con sus amigos.
Esta red social, aunque permite el envío de mensajes, imágenes y vídeos de manera privada, la realidad es que se utiliza esencialmente de forma pública. Y lo que es aún más importante y peligroso, cualquier mensaje puede llegar a extenderse por la red en un instante y ser visto por millones de personas en unos pocos minutos.
Por ello es tan importante pensar antes de tuitear, por la enorme repercusión y por la consiguiente imposibilidad de eliminarlo una vez reproducido.
Pero, además de utilizar el sentido común antes de publicar información propia o ajena en esta omnipresente red social, debemos conocer y aplicar unas sencillas reglas que el propio Twitter exige y que quizá no todo usuario conozca.